Mi Rafael
“Mi Rafael”: así llamaba al Santo Hermano Rafael Arnáiz (1911-1938) el Padre Teófilo Sandoval (1902-2000) en algunos de sus escritos. Nadie como el Padre Teófilo, su confesor y guía, había comprendido al Hermano Rafael.
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“Mi Rafael”: así llamaba al Santo Hermano Rafael Arnáiz (1911-1938) el Padre Teófilo Sandoval (1902-2000) en algunos de sus escritos. Nadie como el Padre Teófilo, su confesor y guía, había comprendido al Hermano Rafael.
Pamplona, 1991. A sus diecinueve años, Urbegi comienza a experimentar la tormenta interior que es la esquizofrenia. Él todavía no sabe que ese sinvivir del que parece imposible huir, acaba sólo de comenzar. Cada mañana, trata de encontrar un argumento para continuar en la batalla de la vida.
Carmen Hernández, iniciadora del Camino Neocatecumenal junto a Kiko Argüello, nació en Ólvega (Soria) el 24 de noviembre de 1930. Fue la quinta de nueve hermanos y vivió su infancia y juventud en Tudela (Navarra). En 1954 obtiene la licenciatura en Químicas en Madrid. Siguiendo la vocación misionera que había sentido desde pequeña, decide ingresar en el Instituto de Misioneras de Cristo Jesús.
Todos los padres quieren a sus hijos, pero no todos saben quererlos. Hay que saber administrar el amor: amar con cabeza, que no significa quererlos menos, sino al contrario, supone un plus afectivo por nuestra parte. En esta tarea no se puede ir con tiento sino que hay que derrochar cariño por los cuatro costados, pero sin malgastarlo, o lo que es lo mismo, sin gastarlo mal.
Ya han aparecido muchas biografías del papa Francisco. Sin embargo, ninguna de ellas había dado las razones de la extraordinaria devoción que profesa por la santa de Lisieux.
Propuestas para liberarnos del secuestro del descanso. En este libro se plantea una visión renovada del sentido y modo de gestionar el descanso en una sociedad caracterizada por la velocidad, la tensión, el estrés, la fatiga, el cansancio y la prisa. Su lectura es una invitación a investigar y ahondar en el propio descanso.
Amigo lector, tienes entre las manos la confesión de un profeta de nuestro tiempo, y como tal de un hombre rompedor, libre, molesto para unos, providencial para otros, que a sus noventa y dos años de vida escribe sus memorias sin tapujos, con humildad y osadía, gracias a una prodigiosa mezcla de vida y pensamiento
El siglo XX ha sido el siglo de las mujeres, no solo por la masiva incorporación de la mujer al mercado laboral sino, también, por su visibilidad en la esfera pública. La mujer ha dado un paso adelante, dejando de centrarse exclusivamente en la vida privada –el cuidado de los menores, las personas dependientes y el hogar– y tomando cada vez mayor protagonismo:
El aprendizaje de valores morales en la toma de decisiones.
En nuestra sociedad globalizada y tecnológica, guiada por factores de eficacia y eficiencia, en la que a menudo nos vemos obligados a tomar decisiones rápidas, complejas y, quizás, sin demasiadas contemplaciones éticas, un libro así estaba resultando imprescindible.